viernes, 21 de agosto de 2009

Comité de transición en Iztapalapa



20 de agosto 2009

El día de hoy iniciamos formalmente el proceso para asumir el gobierno de Iztapalapa y con ello poner en marcha un programa a favor de la gente.

Desde hace algunas semanas hemos insistido en la necesidad arrancar el proceso de transición determinado por la Ley. Inexplicablemente esto se retrasó y es hasta ahora que se instala el Grupo de Trabajo de Entrega-Recepción.
Hemos acudido a esta cita porque queremos un cambio de administración institucional, transparente, profesional y apegado a la Ley.
Para nosotros, la transición también significa rendición de cuentas. Queremos que los ciudadanos sepan qué se recibe y cómo se recibe. Que tengan la certeza de los recursos con los que dispone la delegación y la forma en que se utilizaron.
No exageramos cuando afirmamos, que será la primera vez que las autoridades delegacionales rinden cuentas. Después de nueve años de opacidad hoy enfrentan una responsabilidad ineludible.
Les queremos informar que a partir de hoy, la tarea principal del equipo de transición será revisar todas y cada una de las áreas de la delegación; todas y cada una de sus actuaciones.
Con el mayor de los profesionalismos y con la mayor responsabilidad, trabajaremos en la recepción del gobierno delegacional.
Para cumplir con nuestras funciones, hemos entregado una solicitud e información a la autoridad saliente donde le formulamos una relación pormenoriza de documentos relativos al estado que guarda la administración, tales como:
Los contratos y convenios celebrados; toda la información relacionada al personal de Estructura, de base, honorarios y eventuales; la información presupuestal detallada por Unidad Administrativa, programa, subprograma, capítulo de gasto y partida; las adquisiciones; los programas y subsidios; la obras públicas; las autorizaciones y permisos; los padrones de beneficiarios; las altas y bajas de los mismos; los criterios de selección; los recursos ejercidos hasta este momento.
Es decir, hemos entregado una primera solicitud de información, para iniciar nuestro trabajo y hemos propuesto un cronograma de actividades para revisar el trabajo de cada una de las Direcciones Generales y Territoriales.
Queremos que quede muy claro. Esta transición será con los ciudadanos, ellos serán nuestros ojos y oídos. Estaremos cerca de los trabajadores, que conocen los problemas y dificultades que enfrenta la delegación para atender los problemas de los ciudadanos.
Compañeras y compañeros. El camino no ha sido fácil. Como en ninguna otra parte del mundo, en un proceso democrático, hemos enfrentado y vencido múltiples obstáculos, incluso algunos que parecían insuperables. Pareciera que la voluntad del pueblo y el voto de los ciudadanos no son suficientes para determinar su gobierno. Que en Iztapalapa estamos obligados a hacer más.
Con el voto de la gente ganamos la candidatura del PRD a la jefatura Delegacional y colocamos a nuestra propuesta con la intención del voto más alta entre los candidatos a Jefes delegacionales de la ciudad. Nuestros adversarios más cercanos estaban a más de 30 puntos de distancia.
En esa fase de la campaña, logramos generar una intensa movilización en favor del cambio verdadero. De una transformación profunda, que le pondría fin a la sucesión familiar del poder; a la corrupción y a la ineficiencia de funcionarios públicos. Que asume en la administración pública una posibilidad de servir al pueblo no de enriquecerse. Que entiende que su único compromiso es con los ciudadanos, no con los amigos o familiares.
Cuando se produjo el golpe del tribunal, habíamos conquistado la voluntad y los corazones de miles de personas dispuestas a construir una delegación con derechos plenos para todos.
En Iztapalapa hicimos historia, al lograr en 15 días informar a los ciudadanos de la forma de evitar la imposición y el atropello a la voluntad popular. Junto con Andrés Manuel López Obrador, derrotamos a los que se creían invencibles y suponían que la imposición estaba consumada.
El 5 de julio ganamos, porque el pueblo estaba cansado de tantos atropellos; ganamos por que la voluntad del pueblo es más poderosa que la traición y el engaño; ganamos por que los ciudadanos de Iztapalapa están hartos de ser considerados ciudadanos de segunda; ganamos por los miles de voluntarios que se sumaron a la lucha; ganamos por el respaldo incondicional y solidario de López obrador.
Por estas razones, es tan importante este evento. Porque con ello, se comienza a materializar la voluntad libre de los ciudadanos y su esfuerzo sin precedentes para hacer valer su voto.
Nunca más el interés personal o de grupo estará por encima de los ciudadanos.
Gracias a todos.